No es cierto que un 25 de diciembre de hace 2024 años naciera un niño en Palestina, ni fue hace 2024 años, ni era diciembre. Los historiadores dicen que probablemente entre el 8 y el 4 antes de Cristo. Según Lucas pernoctaban al raso por lo que probablemente se situaba en el equinoccio de primavera. Tampoco parece muy creíble que naciera de una mujer virgen, que engendró con un Ángel, que era el Espíritu Santo. I el pobre San José, ¿no dijo nada? ¿No pidió el divorcio? ¿También se creyó la fake tan alucinante?
Vamos a dar una lección de cultura religiosa. El natalicio de Jesús un 25 de diciembre no se fijó hasta el siglo IV de nuestra era. De esta forma, entre los años 354 y 330, durante el pontificado de Liberio (352-366), se tomó por fecha inmutable la de la noche del 24 al 25 de diciembre. Nos dice la Iglesia que Jesús vivió hasta los 33 años, lo cierto es que los historiadores estiman que murió entre los 41 y los 45 años.
Vamos para atrás. Hasta finales del siglo IV lo que se celebraba era nacimiento del Sol Invictus en el imperio romano. De hecho, las fiestas de la Saturnalia duraban entre el 17 y el 23 de diciembre. Después de la ceremonia religiosa había grandes festejos y banquetes, donde se abolían temporalmente las clases sociales.En el Egipto Antiguo se creía que Isis, la virgen Reina de los Cielos, quedaba embarazada en el mes de marzo y daba a luz a su hijo Horus a finales de diciembre. Horus era presentado como un recién nacido (a menudo recostado en un pesebre) con cabello dorado, que tenía un dedo en la boca y el disco solar sobre su cabeza.Muchos siglos antes que Jesús-Cristo, el dios Mitra, según la leyenda popular ya había nacido de virgen un 25 de diciembre, en una cueva o gruta, siendo adorado por pastores y magos, obró milagros, fue perseguido, acabó siendo muerto, resucitó el tercer día…
Y qué podemos decir de la idea que Jesús era hijo de dios. ¿Cómo puede ser hijo de dios si dios no existe? En fin, amigos, a pasar las fiestas bien y tener preparados los Almax.
De todas maneras, si fuera por el gobierno genocida de Israel el belén hubiera sido bombardeado y no quedaría ninguna figura de él. Si José y María hubieran llegado a España, la ley de extranjería hubiera provocado que, bendecidos por la Conferencia Episcopal Española, los hubieran detenido y los hubieran metido en un CIE, donde Maria tendría a su hijo Jesús. Feijoo, Abascal y Ayuso harían tuits felicitando al gobierno y a la policía por la rápida detención. La UE agradecería a España su acción.
Otro posible motivo alternativo de que celebremos el nacimiento de Jesús con tanto empeño es que en España a nadie le gusta hacer el amor, por lo que es el país del mundo con menos natalidad. Que nazca uno sólo provoca que lo celebremos de forma exagerada.
Felices fiestas y buen año nuevo que no pinta muy bien, la verdad.
Com diuen els del «Abrazo del Oso», todo empieza en Sumer.
Bona adoració del Sol estos dies