Jordi Serrano en nombre del Comité Editorial de Memoria del Futuro:
Apesadumbrados por el genocidio en Gaza. No tenemos palabras, pero nadie podrá decir que nos mantuvimos equidistantes o callados. Hemos visto muchas guerras, muchos conflictos, pero ninguno de la gravedad del que el Estado criminal de Israel está cometiendo los últimos meses. La situación se tan grave que no tenemos palabras, se han acabado los adjetivos. Primo Levi el hombre que nos intentó explicar la raíz de la más grande maldad, el holocausto, siendo él mismo víctima, nos dijo: “Existe Auschwitz, y por tanto no puede existir Dios.” Y nosotros podemos decir hoy: Existe Gaza, y por tanto no puede existir Dios”. Y también nos dijo “No es lícito olvidar, no es lícito callar. Si nosotros callamos, ¿Quien hablará?” Y nosotros hablamos viendo el límite del abismo moral.
Por eso publicamos hoy este pequeño poema del poeta palestino Mahmud Darwish (1941-2008) de “Un día de árboles cortados”.
El limonero
Teníamos tras la verja
un limonero. Sus granos amarillos
brillaban como lámparas. Sus flores
eran un fragante abanico en nuestro barrio.
Teníamos tras la verja
un limonero. Nuestro.
Más, para hacer adorno,
de sus galas; y diadema y aroma
de sus ramas, nos lo cortaron.
Nos dejaron
sin nuestro limonero.
Nuestros ojos
no volvieron a ver la primavera.
Y acabamos con el grito histórico de los palestinos en las manifestaciones: “Birrúh, bid-dám, Nafdík ia Falastín, que significa: con el espíritu, con la sangre, te rescataremos Palestina.
0 comentarios